Fuente: Gestión
De acuerdo al análisis de diversos sectores, debido a la escasez de fertilizantes a nivel mundial, que ha llevado a elevar su costo en el Perú hasta en 300%, los efectos en los precios de los productos agrícolas se dejarán sentir aún en la próxima campaña agrícola 2022 – 2023.
La Convención Nacional del Agro (Conveagro) estima que la carencia de insumos agroquímicos y aumento de costos logísticos puede llevar a alzas de precios en promedio del 30% para principales productos como el maíz amarillo para el periodo de cosecha de dicha campaña.
Lucila Quintana, delegada de Conveagro, explicó que debido a la escasez de urea, una estimación conservadora es que se puede reducir en 25% las áreas de cultivos de la campaña agrícola 2022-2023, que se inicia en agosto próximo y deberá concluir en julio del 2023, aunque otros cálculos, proyectan que se retraerían hasta en 40%.
Por su parte, ComexPerú estimó que hay un déficit de 180 mil toneladas de urea, lo cual pone en riesgo la campaña 2022-2023, situación que podría afectar a 500 mil agricultores comerciales que producen maíz, arroz, papa, entre otros productos.
A su turno, Marco Vinelli, director de la Maestría en Administración de Negocios de Esan, explicó que actualmente estamos terminando la campaña agrícola del 2021-2022, que inició en agosto, por lo que aún no estaríamos viendo totalmente los efectos de la crisis.
“En la campaña que se viene el próximo año van a estar más caros los alimentos y por eso el problema va a estar en las familias que no generan ingresos o que generan muy pocos ingresos”, comentó, asimismo, el especialista estimó que los costos de producción de la siguiente campaña agrícola (derivados del alza en 300% de precios de fertilizantes), se podrían elevar en un 40%.
Vinelli indicó que si bien los productores no podrán trasladar todo el aumento del costo al precio final, estimó que dichos precios podrían subir 20% para el periodo de cosecha, estimó que las regiones más afectadas serían Piura, Lambayeque, Arequipa, y la región de Lima e Ica, así como en la selva, donde se produce arroz.